Embarquémonos en un viaje en el Tren Maya hacia Ichkabal, la oculta joya maya en la selva de Bacalar. Prepárate para desvelar sus secretos ancestrales y maravíllate con su esplendor olvidado. ¿Listo para la aventura? ¡Sigue leyendo y descubre la riqueza de la Cultura Maya en Bacalar!
Al poniente de la cristalina Laguna de Bacalar, en el hermoso estado de Quintana Roo, yace una joya olvidada de la Cultura Maya - la antigua ciudad prehispánica de Ichkabal. Iniciando su poblamiento hace aproximadamente 2,400 años, Ichkabal es una ventana a un pasado maya glorioso, repleto de riquezas históricas y arqueológicas. Gracias al ambicioso proyecto del Tren Maya en Bacalar, esta maravilla cultural está a punto de ser redescubierta.
Ichkabal no fue simplemente otra ciudad en el mapa de la civilización maya. Tuvo su apogeo entre los siglos III y VII de nuestra era, durante el cual no solo prosperó, sino que también se convirtió en un eje que conectaba diversas regiones de la selva maya chiapaneca y campechana, así como el petén guatemalteco y el oriente de la península de Yucatán.
"Ichkabal, el asentamiento oculto en la selva, es una ventana al esplendor de la civilización Maya. Su descubrimiento y estudio es un testimonio de cómo la historia puede hablar desde las profundidades de la tierra."
En Ichkabal, uno puede rastrear los pasos de la poderosa dinastía Kaan'ul, también conocida como la Dinastía de la Serpiente. Originaria de Dzibanché, esta dinastía influyente se desplazó a Calakmul, extendiendo su influencia a través del norte de Guatemala y rivalizando incluso con la emblemática Tikal. Durante este tiempo, Ichkabal se convirtió en una de las ciudades más poderosas del periodo clásico Maya.
Ichkabal, que en maya significa "entre bajos", refleja la compleja relación entre la civilización maya y su entorno. La ciudad se ubicaba en terrenos que se inundaban durante la temporada de lluvias, ofreciendo a los investigadores una oportunidad única para entender el desenvolvimiento de la agricultura maya en la península de Yucatán.
Gracias a la tecnología Lidar, los científicos han podido mapear esta antigua ciudad maya a pesar de su ubicación en plena selva. Ichkabal abarca más de 60 kilómetros cuadrados, conectándose con Dzinbanché, otra gran ciudad maya, a través de un sistema de caminos conocidos como sacbe'ob.
El mapeo Lidar ha revelado la impresionante complejidad urbanística de Ichkabal, incluyendo edificios que superan los 40 metros de altura. El gran alcance de esta antigua ciudad refleja la monumentalidad de la cultura Maya en Bacalar en su época de mayor esplendor.
"El Tren Maya en Bacalar no solo impulsa el turismo, sino que honra y preserva la rica cultura Maya en Bacalar. Cada piedra, cada edificio en Ichkabal es un relato, un recordatorio de la historia que se niega a ser silenciada."
El proyecto del Tren Maya, junto con el Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas, tiene como objetivo revitalizar Ichkabal y abrirlo al público en agosto de 2024. Esta iniciativa busca preservar y compartir la riqueza cultural de las zonas arqueológicas en Bacalar.
Las ruinas de Ichkabal revelan la diversidad arquitectónica de la cultura Maya, desde edificios de estilo Petén, caracterizados por su verticalidad, hasta joyas arquitectónicas de gran belleza y elegancia. Destacan el edificio E4, con impresionantes mascarones en su fachada, y el edificio E5, donde se halló una intrigante máscara de barro con la imagen de un jaguar decorado con cinabrio, orejeras y cuentas tubulares de piedra verde.
El sofisticado sistema de gestión del agua en Ichkabal, como la "Aguada de los Cocodrilos", es una gran obra de ingeniería hidráulica que nos permite entender mejor los sistemas agrícolas en la región.
El proyecto del Tren Maya, junto con el Promeza, proporcionará una inversión vital para continuar con los procesos de investigación y conservación de Ichkabal. Esto permitirá el acceso público a este sitio histórico, contribuyendo a la revalorización y difusión de la cultura Maya en Bacalar y proporcionando a los viajeros y comunidades locales una inigualable ventana al pasado.
Ichkabal es más que una reliquia del pasado; es un testimonio vivo de la grandeza y sabiduría de la nación Maya mesoamericana. La revitalización de esta antigua ciudad a través del proyecto del Tren Maya en Bacalar es un paso importante para honrar y perpetuar la memoria, el legado y la fuerza cultural de los pueblos mayas del presente, un componente fundamental de la diversidad cultural de México y de América.
Ichkabal se encuentra ubicada al poniente de la laguna de Bacalar, en el estado de Quintana Roo.
El poblamiento de Ichkabal comenzó hace aproximadamente 2,400 años.
Ichkabal no fue simplemente otra ciudad en el mapa de la civilización maya. Tuvo su apogeo entre los siglos III y VII de nuestra era, durante el cual no solo prosperó, sino que también se convirtió en un eje que conectaba diversas regiones de la selva maya chiapaneca y campechana, así como el petén guatemalteco y el oriente de la península de Yucatán.
Ichkabal, que en maya significa "entre bajos", refleja la compleja relación entre la civilización maya y su entorno. La ciudad se ubicaba en terrenos que se inundaban durante la temporada de lluvias.
Gracias a la tecnología Lidar, los científicos han podido mapear esta antigua ciudad maya a pesar de su ubicación en plena selva.
El proyecto del Tren Maya, junto con el Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas, tiene como objetivo revitalizar Ichkabal y abrirlo al público en agosto de 2024.
El proyecto del Tren Maya, junto con el Promeza, proporcionará una inversión vital para continuar con los procesos de investigación y conservación de Ichkabal. Esto permitirá el acceso público a este sitio histórico, contribuyendo a la revalorización y difusión de la cultura Maya en Bacalar y proporcionando a los viajeros y comunidades locales una inigualable ventana al pasado.
Ichkabal es más que una reliquia del pasado; es un testimonio vivo de la grandeza y sabiduría de la nación Maya mesoamericana. La revitalización de esta antigua ciudad a través del proyecto del Tren Maya en Bacalar es un paso importante para honrar y perpetuar la memoria, el legado y la fuerza cultural de los pueblos mayas del presente, un componente fundamental de la diversidad cultural de México y de América.