El genio creativo humano a menudo se revela a través de obras arquitectónicas que resisten la prueba del tiempo, y Chichén Itzá, un tesoro maya incrustado en la península de Yucatán, es uno de estos impresionantes testimonios. Reconocida en 1988 por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, esta ciudad maya que brilló intensamente durante más de cinco siglos es un icono cultural para México y el mundo.
Chichén Itzá: Un Puente entre el Pasado y el Presente
Hoy, junto con Teotihuacán, Chichén Itzá recibe la mayor cantidad de visitantes en el continente americano. Con la llegada del Tren Maya, conocido en la lengua maya como ‘Jach séeba’ an báalam’, se espera un incremento significativo en el número de visitantes. Este aumento plantea retos que conllevan su estudio, preservación, manejo adecuado y atención al público.
Durante su época de mayor esplendor, entre los años 900 y 1200 d.C., Chichén Itzá destacó por su inconfundible arquitectura que incorpora elementos de otras regiones de Mesoamérica con su sello particular. Se convirtió en una ciudad cosmopolita que mantuvo el control económico de las redes de comercio e intercambio en una amplia región, constituyendo el centro rector de prácticamente toda la península de Yucatán, y logrando cohesionar a los diferentes grupos mayas de su época.
Investigaciones y Descubrimientos
Las investigaciones arqueológicas de los últimos 100 años han permitido reconstruir este desarrollo histórico y corroborar la importancia de esta gran urbe. Gracias a estudios especializados interdisciplinarios, hoy sabemos, por ejemplo, que los materiales recuperados y conservados del cenote sagrado provienen de regiones lejanas, como el oro de Centroamérica y Sudamérica, o la turquesa de la región del Nuevo México.
Con una afluencia anual que supera los dos millones y medio de visitantes, la infraestructura turística del sitio se ha visto considerablemente superada. Es por esto que el proyecto Tren Maya ha propuesto poner en marcha una estrategia para atender las crecientes necesidades de atención al público.
Mejoramiento y Desarrollo
Este desarrollo incluye un nuevo Centro de Atención a Visitantes, Catvi, que resolverá integralmente la demanda de servicios que plantea la zona arqueológica, atendiendo a su sostenibilidad en todos los órdenes. Por su parte, con el Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas, Promeza, que lleva seis meses en operación, se están desarrollando acciones de investigación, estabilización de estructuras, conservación de elementos arqueológicos, apertura de áreas y actualización del cedulario y de las rutas del recorrido con el propósito de abrir al público el sector conocido como Serie inicial o Chichén Viejo, que da cuenta de los inicios de su poblamiento.
Además, se ha concluido el proyecto ejecutivo del museo de sitio de Chichén Itzá, que tiene el propósito de ofrecer información y una interpretación accesible de la zona arqueológica, exhibiendo más de 800 piezas, todas ellas provenientes del lugar, algunas expuestas por vez primera y otras que regresarán a su sitio de origen.
Chichén Itzá y el Tren Maya: Un Legado Recobrado
En la ciudad prehispánica de Chichén Itzá, gracias al proyecto Tren Maya, ‘Jash séeba’an báalan’, se está llevando a cabo una importante labor de recuperación de la memoria de los antiguos mayas y preservación de su valioso patrimonio arqueológico. Este legado ofrece claves importantes para comprender el devenir y el ser de los pueblos mayas del presente.
Conclusión
La rica historia, las impresionantes estructuras y la belleza natural de Chichén Itzá se combinan para hacer de este un destino turístico que todos deben experimentar al menos una vez en la vida. Con la llegada del Tren Maya, la antigua ciudad maya está preparada para acoger a aún más visitantes y compartir su rica historia y cultura. No se pierda la oportunidad de ser parte de este emocionante viaje al pasado a través del Tren Maya con Tren Maya Trips.
Preguntas Frecuentes sobre la Zona Arqueológica de Chichén Itzá en Yucatán